Hablar de protocolo abiertamente en la mayor parte de las ocasiones hace que la sociedad piense en el a nivel institucional y en referencia a las Casas Reales, dando ejemplo de la oficialidad que este elemento contempla, pero, ¿Conocen la existencia del protocolo a nivel privado?

Esta herramienta de la comunicación, basada en la potenciación de generar intangibles en las organizaciones, encuentra en el sector de la empresa, un nuevo segmento de mercado en el que poder desarrollarse y justificar de nuevo sus beneficios.

Existe un debate abierto en el sector entre puristas y tecnócratas acerca de este modelo del protocolo, donde unos apuestan únicamente por el protocolo como rama de la comunicación institucional y otros ven aportes positivos en su ejecución en otros sectores en la sociedad como es el empresarial.

Bajo mi punto de vista, hablar de corporativismo, sugiere recordar logotipos, letras y colores entre otros, pero, ¿Qué pasa con la manera de comunicar y con la imagen que se da en los actos que la empresa organiza?

El  protocolo empresarial será el encargado de que el personal que la compone, actúe en una misma dirección desde la unidad  y así se contemple la obtención de imagen, motivación y orgullo de pertenencia a la organización. ¿Cómo se consigue? A través de la implementación de una serie de acciones, estudiadas milimétricamente para originar el valor diferenciador necesario para competir en el mercado.

Existe otro supuesto que es vital tener en cuenta en las acciones empresariales a las cuales acuden figuras públicas. En la mezcla de público y privado, se debe crear un llamado protocolo mixto, analizado y creado con miras de futuro, para las situaciones en las que acudan cargos institucionales a visitar la empresa, realizar una inauguración, participar en un simposio o reunirse con el presidente de la misma por citar algunos ejemplos.

Este tipo de protocolo debe formar parte de los manuales internos corporativos, en un apartado al que se llamará manual de protocolo y que incluirá al menos los siguientes aspectos:

• El organigrama de la empresa
• Jerarquías y símbolos
• Protocolo mixto
• Procedimiento para las reuniones
• Recibimiento de visitas en la organización
• Atención telefónica, e-mail y cartas postales
• Regalos
• Eventos y actos empresariales

Estos puntos son sólo una muestra de lo que el protocolo puede aportar a las organizaciones privadas. Tengo claro que hablar de protocolo empresarial, es hablar de estrategia y de vertebrar la transmisión de la filosofía, misión y visión de la misma en sus mensajes, generando una misma imagen que a medio y largo plazo suponen rentabilidad, reputación y calidad.

Y tu empresa, ¿Tiene manual de protocolo? Apuesta por profesionales con experiencia en la creación de este importante documento empresarial.